El titular del Palacio San Martín dijo que se intentó ingresar, en un avión destinado a ejercicios, aparatos para interferencias telefónicas, comunicaciones y envío de datos, como material caratulado como secreto, armas y drogas psicotrópicas. "La Argentina se merece una disculpa", indicó.
El ministro de Relaciones Exteriores explicó, en declaraciones a CNN en Español, que Estados Unidos ingresó, el viernes último, un vuelo con material militar para realizar un curso con nuestras fuerzas de seguridad, pero que, junto con el material autorizado para ingresar, habían elementos no declarados.
"En ese avión se incluía material que, a nuestro entender era sospechoso, y que sirve para interferencias telefónicas, comunicaciones y envío de datos. Había material caratulado como secreto, armas, drogas psicotrópicas y de otro tipo", afirmó el diplomático.
El canciller explicó que para el curso, que iba a comenzar el 10 de febrero último, el gobierno norteamericano entregó, a mediados de diciembre de 2010, una lista de buena fe, que contenía el detalle de lo que iba a ser ingresado para el ejercicio, y que fue aprobado por la Argentina. Además, el ministro indicó que esa lista nunca fue alterada ni cambiada.
En tanto, Timerman dijo que "en ningún momento (el subsecretario de Estado adjunto para América latina) Arturo Valenzuela pidió disculpas por esto" y precisó: "Le dije que las leyes están para ser cumplidas, aquí y en los Estados Unidos".
"No nos han dado ninguna explicación sobre que pensaban hacer una vez ingresado ese material. Desde la Argentina estamos dispuestos a colaborar con la investigación y ellos no. Por eso entregue una nota de protesta", aseguró.
Con respecto a la devolución de los elementos incautados, Timerman dijo que "cuando las autoridades argentinas, que tienen competencia sobre el ingreso de este material, consideren que para la investigación no es necesario tenerlo, se devolverá".
Incidente repetido
El canciller Timerman también explicó que no es la primera vez que los Estados Unidos evita las leyes argentinas para trasladar elementos militares.
"Ya en agosto la embajadora en la Argentina (Vilma Martínez) nos pidió por favor que dejáramos retornar a los Estados Unidos un avión que contenía material que no estaba incluido en la lista de buena fe. Así que este no es el primer incidente, pero se solucionó por la intervención de la embajadora", dijo.
Timerman precisó: "En este caso se negaron abrir una valija y durante seis horas dos soldados norteamericanos estuvieron sentados sobre ella. Cuando la abrimos había varias dosis de morfina y otros psicotrópicos; elementos de comunicación muy sensibles; interceptores de llamadas; elementos para guardar datos que decían “secreto, no tocar”, y algo que me llamó mucho la atención: Una cartilla que en varios idiomas decía, ‘soy un soldados de los Estados Unidos, avísele a mi embajada que he sido arrestado’. Además, había un baúl con medicamentos vencidos".
El canciller aclaró que el avión no es de combate, sino de carga. "Cuando logramos convencer a los soldados norteamericanos, de que se abra la famosa valija verde, ellos exigieron que se haga en un lugar cerrado porque si era fotografiada por satélites de espionaje la seguridad de los Estados Unidos estaría en riesgo".
Por ello, el ministro reiteró la necesidad de la Argentina de conocer el verdadero destino del material no declarado.
"La Argentina sufrió dos atentados terroristas y tiene leyes muy estrictas sobre lo que puede entrar al país, para evitar tener un tercer atentado. Nosotros estamos muy preocupados por nuestra seguridad", indicó.